En nuestro centro, Medalla Milagrosa “El vigía” de Torremolinos, somos muy conscientes de la necesidad de crear espacios diversos que den lugar a entornos seguros, donde nuestro alumnado pueda compartir experiencias de juego de su interés contribuyendo a desarrollar hábitos de relación asertivos, habilidades sociales y valores esenciales en nuestra sociedad, como son el respeto hacia los demás, el cuidado de nuestro entorno, solidaridad, etc.
Con este fin, el equipo de Convivencia se planteó como un objetivo del presente curso académico crear una sala de juegos para favorecer que el tiempo de recreo sea más inclusivo y activo para todo el alumnado, pero especialmente para aquellos que presentan una serie de características personales y/o sociales específicas.
La primera decisión fue seleccionar el espacio donde se llevaría a cabo. Se decidió que fuese la antigua biblioteca porque se encuentra en la primera planta y tiene fácil acceso desde el patio, además conservaba algunas estanterías.
Una premisa clara desde el primer momento fue hacer partícipe al alumnado Ayudante de la Convivencia. Para ello, se les reunió y se les explicó la iniciativa. Después de reflexionar sobre cuál podía ser su aportación, se acordó que ellos serían los responsables de establecer las normas, hacer cartelería fácil de asimilar mediante apoyos visuales; y, transmitir toda la información a las distintas clases de Primaria.
Para facilitar esta labor, se les suministró una serie de recursos visuales. Posteriormente, ellos de forma consensuada eligieron los más adecuados y se elaboraron los carteles. Previamente a la inauguración de la sala de juegos, el alumnado mediador fue a las diferentes clases explicando la finalidad de la sala de juegos, ubicación, normas de uso, horarios, etc., usando como recurso la cartelería elaborada por ellos.
Al finalizar sus exposiciones y aclarar dudas, se preguntó en las distintas clases si estaban de acuerdo en respetar y hacer un buen uso de la sala de juegos, firmando un documento para dar fe de ello. Esta documentación se expuso en la sala de juegos conjuntamente con la cartelería de las normas y obligaciones, permitiendo recordar en el tiempo el compromiso adquirido.
Hemos de decir que la experiencia ha sido muy positiva, tanto por parte del alumnado que hace uso de este recurso como de las familias. Éstas siempre han respondido donando juegos y libros cuando se les ha solicitado.
Con esta iniciativa, se ha creado un entorno educativo más enriquecedor y equitativo, al promover la participación en actividades lúdicas de todo nuestro alumnado respetando sus gustos e intereses, suscitando la convivencia y el respeto.
– Colegio Medalla Milagrosa «El Vigía»